viernes, 1 de enero de 2016

la belleza y el espectador











Sabemos por Lacan que los objetos nos devuelven la mirada.


he experimentado esa afirmación en múltiples ocasiones por lo que la considero empírica.

que fácil es ridiculizar la obra de un artista que no gana mucho dinero con su trabajo.

ayer tuve un desencuentro con un artista a quien respeto.
por causas ajenas a lo que estábamos hablando apareció en mi ordenador el proyecto en el que me hallaba sumergida antes de romperme la clavícula.
al ver el título el susodicho hizo un comentario despectivo sonriendo con cierto sarcasmo.
me enojé explicando con claridad meridiana la mezquindad de su comentario.
me vino bien permitirme que saliera mi genio porque puse en palabras la explicación intelectual del proyecto y además me situé en el lugar en el que me encuentro.
enseguida retiró sus palabras y creo que a pesar de su extrema juventud comprendió lo que yo trataba de explicar es bastante sutil.

la obra de arte, quizás mas que ninguna otra cosa, está sujeta a la mirada del espectador.
lo he experimentado tantas veces con los visitantes en mi estudio que lo afirmo sin temor a equivocarme.







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